La junta militar birmana ha presentado este miércoles cargos por corrupción contra el exministro de Inversiones Thaung Tun, que fue expulsado del cargo tras el golpe de Estado del 1 de febrero.
Así, el político birmano ha sido imputado en el marco del artículo 55 de la Ley Anticorrupción por presuntamente haber alquilado 3,6 hectáreas de terreno en Rangún a una empresa por debajo del precio de mercado. De ser hallado culpable podría recibir una pena de hasta quince años de prisión, según informaciones del diario ‘The Irrawaddy’.
Thaung Tun, que también trabajó como asesor de seguridad nacional, fue detenido tras el golpe militar, junto a la antigua ‘líder de facto’, Aung San Suu Kyi, y el presidente del país, Win Myint.
La mayoría de ministros del antiguo gobierno civil de Birmania han sido acusados por la junta militar de haber cometido actos de corrupción a pesar de la falta de pruebas. Thaung Tun, antiguo embajador en Washington durante el anterior régimen militar, se encontraba al frente del Ministerio de Inversiones y Relaciones Económicas Exteriores.
Suu Kyi, por su parte, fue detenida horas después de que se produjera la asonada militar. La Justicia la acusa de haber cometido una decena de delitos, entre los que se encuentran la violación de las leyes de comercio exterior, la vulneración de las medidas contra el coronavirus, actos de corrupción e incitación a la sedición.
Desde el golpe militar el país ha sufrido un repunte de la violencia. Varias ONG estiman que más de 1.000 personas han muerto a manos de las fuerzas de seguridad en las protestas contra la junta.
CP